Esta semana pudimos entrevistar a la gente de Lamorte que sacan álbum debut en este mes de marzo. Pero además de eso, hoy, en AlgodeRock, el mismo día que sale a la calle el single adelanto de su trabajo “VIE”, en exclusiva, hacemos la reseña de lo que podrán escuchar a partir del 15 de marzo. Agradecemos a la banda por darnos esta responsabilidad y la confianza de poner en nuestras letras lo que nos ha parecido el disco.
Sin más comenzamos con nuestras sensaciones.
El álbum contiene 6 canciones (Mezclado y Masterizado por Iván Ferro) que, podríamos decir, es un E.P., ¿verdad? Pues no lo parece porque se trata de esas composiciones que se convierten en conceptuales, en una idea global separada por breves intersecciones de silencio, como buscando jugar con cierta teatralidad para luego, en el directo, estimamos, se convierta en una representación ligada al arte, a la vida, a la muerte, a la metempsicosis.
Abre el álbum con First Cry. Se nota la intención de marcar el territorio desde el principio. Son tres guitarras las que van al frente, anunciando que algo va a ocurrir. La intensidad va “increscendo” apoyada en la base orgásmica de la batería y el bajo que se acompasan y dan ese toque de densidad necesario para que entre la voz. Entonces la respiración se acelera un poco dejando claro que eso del “Grito Primario” es la interacción con este Mundo. ¿La oscuridad es necesaria para salir a la luz? Lamorte da a entender que sí. A nivel técnico suena perfecto, bien producido, y con ese toque épico que dan ganas de volver a los ´90´s para jugar en un cuarto oscuro a “Silent Hill”
Pasamos al track 2: Air. Queda claro que mientras la banda va narrando los pasos elementales de un ser al nacer, va poniendo sobre la mesa que este disco es una idea global, que no te vas a escapar de pensar en algo profundo mientras las guitarras van llenando tus pulmones y cambiando el ritmo de las notas. Las voces se mantienen en el mismo tono de congoja y profunda presión. Son algo más de 2 minutos para completar la entrada en el álbum. Los toques Stonner le dan una complejidad que te lleva a sacudir la cabeza en los últimos 20 segundos de. Para luego empalmar directamente con las canciones 3 y 4 (Every nigth, every breathe y No surrender) con un toque que te lleva a pensar en Tool por los fraseos de las guitarras y el bajo. Ya cruzamos el ecuador de la obra y seguimos pendientes de que algo está asomando para quedarse en uno, como esas sombras que nos parece ver por el rabillo del ojo en una noche de resaca lisérgica. Es como caminar descalzo en una alfombra, entre perdido y pendiente de no pisar algún cristal que no se ve, pero uno adivina que por allí anda gracias a la breve distorsión que la banda utiliza para dar algo de variedad y color al disco.
Ya con la canción 5 Last Call (elegida como single adelanto) se pone en la mesa todo el juego de cartas que se estuvo preparando por algo más de un año. Es la última llamada, claro, para que cada uno de los músicos aporte su visión particular de “VIE”, aunque bien ensamblado con el resto pero, sobre todo, y puede que eso sea lo mejor de este disco, los cambios de ritmo que no son abruptos, ni experimentales; es lo que hace que te des cuenta que cuando alguien dice “es que la obra lo pedía”, se refiere a esto.
Cerramos con Dead Soul… es complicado hablar de esta canción. En su momento hace más de 15 años, existió una página llamada Requiem for a dream (nada que ver con la película) una productora holandesa que había convertido una historia con animaciones en flash que se convertía en una historia interactiva con imágenes. Apenas algo de música de guitarras y alguna voz de fondo, nada más (eso y un poco de psicotrópicos) te metía en un bucle donde los colores, las densidades y los movimientos suaves (a veces explosivos) te ponían a tope para saber que formabas parte de algo que ya existía. Bueno, esa es la sensación que me termina de transmitir el cierre del álbum: algo que me ha envuelto con sonidos agresivos pero bien orquestados. Mientras en estos 6 minutos todo se pone un poco más oscuro, algunos acordes no hacen que te pongas triste, al contrario, te dan ganas de levantarte, salir a la calle y comprarte un par de cervezas y ver caer la tarde mientras en un suave “fade” pensamos en poner de nuevo el disco y pasear por esta galería de sonidos e ideas que Lamorte ha diseñado. “VIE” hace que asomes la cabeza al balcón donde se ha gestado: un montón de concreto que nos hace Ser un grito que necesita de la música para extenderse por la ciudad. Menos mal que quedan bandas que se preocupan más por el concepto artístico que por el marketing y lo tradicional.
Desde el 15 de marzo en las calles VIE… Discazo debut de Lamorte (muy pronto en https://lamortevie.bandcamp.com/)