Si nunca has escuchado a Killus tienes tarea pendiente, y es que estos valencianos tienen una trayectoria que no posee cualquier grupo nacional. Llevan dando una caña impresionante desde 1998, se mueven entre el groove, el industrial y el gothic metal con una estética y una puesta en escena que no deja a nadie indiferente en los directos, e incluso han compartido público con otras bandas internacionales como Avatar, Ministry o Soulfly.
El pasado viernes 31 de enero presentaron nada menos que su séptimo álbum “Devilish Deeds”, de la mano de Maldito Records. Una obra ambiciosa que cuenta con 14 temas, entre ellos “The Look”, una cover de Roxette bastante interesante y “A Perfect Paradigm (MMXX)”, nueva versión remasterizada del temazo anterior a este disco.
La primera pista es “Canticum Apocalyptica”, una intro que nos va metiendo en situación preparando el ambiente para lo que se avecina. Luego, casi a modo de sorpresa empieza “Devilish Deeds”, una de las canciones más potentes del disco a mi parecer. Personalmente me vuelven loca los temas que empiezan dándolo todo, con un grito desgarrado y un riff oscuro, y si además luego viene un estribillo algo más melódico y cantable me termina de conquistar. Las sensaciones que se crean al combinar estos dos temas me resultan muy interesantes, todo un acierto.
Destacar las mezclas vocales del disco, el potente sonido programático, “Vortex” por ejemplo suena vocalmente con un estilo nu-metal muy característico. En el disco juegan con la electrónica pero sobre todo con mensajes hablados lo que le da ese aire apocalíptico del que hablamos antes, un claro ejemplo es “No More Hope” o “Ascending Antichrist”. La canción “The End of Vatican” es un tema que te deja perplejo por esas melodías ambientales que te hacen sentir la letra de principio a fin.
A lo largo de la escucha del disco se nota el cambio que han dado Killus a su música con la incorporación del nuevo cantante, mucho más ambiental, temas como “Flash Of Mercy”, “For Death I Lust” así lo demuestra. Un tema que me ha sorprendido es “Ephemeral”, ese inicio que parece que va a estallar en cualquier momento y se queda al final en un Marylin Manson, no se, hay que escucharlo varias veces para entenderlo. “Nemesis” es violencia pura, este tema en directo va a ser una pasada, sin embargo “Raise Me Up” comienza con un sintetizador y una voz dando un discurso hasta que arranca a toda tralla,un estribillo pegadizo que dará que hablar.
“El Péndulo”, es el único tema en castellano del álbum, al final en un disco lleno de discursos, de programación, sintetizadores, casi que suena raro escuchar un tema en nuestra lengua, pero no deja de ser un tema redondo.
Nos encontramos ante un disco redondo, con diversos cambios de ritmo y melodías, elementos de electrónica muy bien integrados, sonidos frescos e interesantes y una temática demoníaca que lo engloba todo y lo hace homogéneo. Parece que la banda no para de mejorar, saben qué hacer para conquistarte y quedarse en un hueco de tu oscuro corazón.
Así que ya sabes, “Devilish Deeds” te está esperando.
POR: MARÍA PAGÉS