The Final Sin es el quinto disco el cuarteto Austriaco Irdorath. Más allá de sus estándares del black metal, en este disco han optado por dar pinceladas de Death y Thrash Metal el cuál era un género que ya habían tocado.
Sin más dilación, este LP de 42 min empieza con Chains Of Virtue, un tema el cual introduce el disco en todo su esplendor, mostrando las bases que éste va a tener. Seguido de Debaptized estos dos temas mezclan perfectamente la temática brutal como melódica de este trabajo, con ritmos milimétricos y una producción impactante.
Redeemer Of The Heretics tiene riffs muy técnicos y pegadizos, es más pesada que las otras dos pero la posición de los ritmos hace que esta fluya bien. Riffs apoteósicos y caóticos, probablemente la más blacker por ahora, con muchos toques que recuerdan a Behemoth. Este tema es el primero en incorporar en una pequeña parte guitarras acústicas, un tentempié para lo que será el siguiente tema.
Divine Delusion va introduciéndose a sí misma con una intro acústa, esta es probablemente la canción más melódica y ‘tranquila” del disco. Con riffs que beben del black metal noruego de los 90, tiene unos riffs tristes que se sostienen con el ritmo desolador y seguido de la batería. Hasta ahora el disco no lo protagonizan mucho las voces, pero en este track, se puede ver como se lucen más. Puede que este tema pueda volverse un poco repetitivo, pero lo compensa bien la nitidez de la grabación y la buena ejecución por parte de los músicos.
Rompiendo con toda melodía, esta composición salta a Disgust Of Enlightnment, un tema que empieza sin tapujos, como una buena patada en la cara la cual no te esperas. Es raro que el tema más bestia del disco tenga un parón tan repentino metiendo partes melódicas de repente, pero en la progresión consiguen arreglarlo y la ejecución sigue siendo espectacular, impresionando con el final llegando casi a lo disonante.
Descansando de tanta tralla seguida, nos introducen en el siguiente tema “The Anthem Of The Final Sin” con una introducción vikinga, bastante ambiental. Este tema es el más próximo al Death/Viking Metal melódico ya que en cuanto a ritmo y melodía recuerda bastante a Amon Amarth. El tema que le sigue ”The Plague, I Am” es la que más tira al Thrash Metal sin duda alguna, un ”tupatupa” atronador que te revuelve la cabeza y las tripas.
Ya en la recta final con tan sólo 2 temas pendientes, empieza Shatterer Of Worlds con un recurso como intro que ya hemos visto antes en estos géneros, el filtro de graves y agudos que cuando vuelve la ecualización, te pega la Hostia suprema, un tema potente y hasta quizás mejor que el que cierra este LP ”When The Last Bell Falls Silent” que sin duda, no es de los mejores de este trabajo.
Dicho esto, este nuevo disco es uno de los que sacian, sabes a lo que vienes cuando quieres escucharlo ya que tiene su sonido bastante consolidado y los temas individualmente son bastante reconocibles.
POR: AARÓN VÁZQUEZ